LO CLARO. Hace pocos años, en entrevista realizada al embajador de México en Malasia, el agregado diplomático hacia una amplia explicación del inusitado despegue económico de aquél paradisíaco país asiático.

Su debilidad –era uno de los países más atrasados y con alta marginación- la convirtieron en su fortaleza.

No apostarían como país, a otra cosa que no fuera la educación. Y más allá: ésta, sería orientada al nivel técnico. Hoy Malasia es una potencia en el desarrollo de TI (tecnologías de la Información) que a nivel mundial, Alemania lidera.

Por tal, es de beneplácito escuchar los sendos acuerdos que llevan a efecto las casas de estudio de nuestro país.

El caso de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, firma convenio de colaboración con su par, del hermano país sudamericano de Chile (Centro de Formación Técnica ENAC).

Para fortalecer los lazos académicos y de intercambio en materia de preparación y formación técnica habilitante para el trabajo. 

A Malasia le resultó. Seguro muy pronto veremos resultados.

LO MUY OSCURO. ¡Basta!

¿Sabe a quién le compete de forma directa auditar el proceder gubernamental? Al fiscal anticorrupción, al ministro de justicia, al órgano de transparencia… ¡No! Es papel de la sociedad el vigilar la correcta aplicación de nuestros impuestos.

Hace dos colaboraciones, señalamos de cómo tras un escritorio que depende del ejecutivo federal en las entidades, los que llevan la responsabilidad de acercar recurso de programas de apoyos sociales, terminan o regateándolos o siendo parte ‘ejecutora y beneficiaria’ de los mismos.

Habremos entonces, de tomar las medidas de observancia en cada uno de dichos escritorios. Hoy seguiremos con temas agrícolas. Pronto lo haremos de temas carreteros.

A la empresa ‘Nómadas’, se le otorgó el apoyo S8000735 por 412 mil 500 pesos. A los ‘Productores del Paraíso’, se les fincaría un recurso de fondos mixtos, estimado en 4,9 millones de pesos relativo a producción de follaje.

Ambos casos, llevan una sustancia común: ponerse la ‘del Puebla’. Donde la primera obedece a interese acordados de antemano y la segunda sería de obligatoriedad (torcida de mano) por parte del beneficiario.

Todo lo descrito, tiene lugar en el ámbito de los apoyos al campo. Concretamente en el impulso al desarrollo de follaje como cultivo maderable.

En el estado norteño tamaulipeco.

Los datos compartidos, son menos que un botón de muestra (si no eran públicos, ahora sí).

Que los que ejercen el poder, detentan el mismo escatimando las herramientas –en dineros- que pretenden hacer llegar a los verdaderos productores de riqueza de esta nación.

Los que laboran la tierra; que hacen más que milagros con tractores desvencijados, con sembradoras montadas en animales domésticos, a los que ya completados los ciclos de cultivos o de tala de maderas, aún se enfrentan al despiadado ejercicio del comercio y del regateo.

No es justo.

Nos quejamos de la barbarie que representaba el latifundismo, la tenencia indiscriminada de la tierra en unos cuantos. Y cuando se pudo concretar el reparto justo… los apoyos de apalancamiento a los productores, semejan al mismo latifundismo.

Quienes determinan la aplicación de recursos en los llamados ‘proyectos productivos’, también escogen a sus mejores ‘productores’. Los que están ‘a modo’ o los que representan sus mismos intereses económicos; dejando de lado a quienes realmente los necesitan.

No se apuren… el papel de contraloría social, nos empodera precisamente a la ciudadanía. Y así habremos de señalar los pasos que lleven a cabo en su beneficio individual… o en el de los mexicanos.

Transparencia. Eso haremos TODOS.

COLOFON. A los pobres campesinos que tienen apostados sus intereses en el campo, de antemano sepan que en 2017, contarán con el 29.1% menos. Por recortes al presupuesto. Menos los moches… 

alejandrodeanda@hotmail.com

@deandaalejandro

HECTOR ALEJANDRO DE ANDA CORTEZ

Colabora en medios impresos y en portales informativos electrónicos. La Columna Claroscuro se publica desde 2007

La columna Claroscuro se publica desde el 2007 en los mismos medios, trisemanal.

Especialmente tocamos temas económicos y de política en general.